Un innovador dispositivo permite sentir el tacto en la piel, como presión o movimiento, lo que podría transformar experiencias en videojuegos, compras en línea, salud y más.
La mayoría de los dispositivos hápticos actuales solo pueden generar vibraciones simples, pero nuestra piel es capaz de percibir una amplia variedad de sensaciones, como presión, estiramiento y movimiento. Ingenieros de la Universidad Northwestern han desarrollado un pequeño y ligero dispositivo que se adhiere a la piel y puede replicar estas diferentes sensaciones. Este dispositivo puede moverse en cualquier dirección para crear toques realistas, como deslizamientos, giros o presiones. Además, la intensidad y velocidad del tacto pueden ajustarse para lograr una experiencia más auténtica.
El dispositivo utiliza una pequeña batería y se conecta a teléfonos móviles o cascos de realidad virtual mediante Bluetooth. Es lo suficientemente compacto como para usarse en cualquier parte del cuerpo o combinarse con otros dispositivos. El equipo espera que esta tecnología mejore la realidad virtual, ayude a personas ciegas o sordas, haga que las compras en línea sean más inmersivas y hasta facilite consultas médicas remotas.
Simular el tacto es un desafío complejo debido a la naturaleza avanzada de nuestra piel, que cuenta con numerosos sensores capaces de detectar presión, estiramiento y vibración. Estos sensores envían señales al cerebro para crear la sensación del tacto. Para replicar esto, un dispositivo debe controlar el tipo de tacto, su intensidad y el momento en que ocurre — algo con lo que la tecnología actual aún tiene dificultades.
Actuador Innovador
Para reproducir la totalidad de las sensaciones táctiles, el equipo de Northwestern creó un diminuto componente llamado actuador , capaz de moverse en cualquier dirección. Esto lo diferencia de los actuadores tradicionales, que solo pueden moverse de una o dos maneras. Gracias a su capacidad de moverse libremente, este nuevo actuador puede generar sensaciones táctiles más realistas y detalladas sobre la piel.
El actuador es extremadamente pequeño y utiliza un imán y bobinas de alambre. Cuando la electricidad pasa por las bobinas, hace que el imán se mueva empujando, tirando, deslizando o girando. Varios de estos actuadores pueden combinarse para crear sensaciones como pellizcos, estiramientos, apretones o golpecitos.
Llevando el Mundo Virtual a la Vida
El equipo integró un pequeño sensor llamado acelerómetro al dispositivo para rastrear sus movimientos y orientación. Esto permite que el dispositivo ofrezca el tipo correcto de sensación táctil según cómo se mueva el usuario. Además, el dispositivo puede enviar información a través de la piel utilizando patrones de vibración específicos. Por ejemplo, el equipo convirtió sonidos como música en señales táctiles, ajustando la intensidad, velocidad y dirección de las vibraciones. Esto permite a los usuarios distinguir entre instrumentos musicales solo a través del tacto.
Con este avance, la tecnología está un paso más cerca de cerrar la brecha entre el mundo físico y el virtual, ofreciendo nuevas formas de interactuar con entornos digitales y mejorando la calidad de vida de las personas a través de aplicaciones prácticas e innovadoras.
Crédito de la Imagen: Universidad Northwestern